dijous, 14 d’abril del 2011

MANIFIESTO A FAVOR DE UNA PSICOPATOLOGÍA CLÍNICA, QUE NO ESTADÍSTICA.




Mediante el presente escrito, los profesionales e instituciones abajo firmantes, nos manifestamos a favor  de criterios clínicos de diagnosis, y por lo tanto en contra de la imposición del Manual Diagnóstico y Estadístico de los Desórdenes Mentales de la American Psychiatric Association como criterio único en la clínica de las sintomatologías psíquicas.
            
Queremos compartir, debatir y consensuar el conocimiento clínico -logía- sobre el pathos psíquico -padecimiento sintomático, que no enfermedad-  a fin de cuestionar la existencia de una salud psíquica, estadística o normativa, así como la impostura clínica e intelectual del desorden, trastorno, enfermedad mental. También queremos denunciar la imposición del  tratamiento único -terapias tipificadas para trastornos formateados- por el menosprecio que supone a las diferentes teorías y estrategias terapéuticas, y a la libertad de elección de los pacientes. En el momento actual, asistimos al devenir de una clínica cada vez menos dialogante, más indiferente a las manifestaciones del padecimiento psíquico, aferrada a los protocolos y a tratamientos exclusivamente paliativos para  las consecuencias, y no para  sus causas. Tal y como dice G. Berrios (2010) «Nos enfrentamos a una situación paradójica en la que se les pide a los clínicos que acepten un cambio radical en la forma de desarrollar su labor, (ej. abandonar los consejos de su propia experiencia y seguir los dictados de datos estadísticos impersonales) cuando en realidad, las bases actuales de la evidencia no son otras que lo que dicen los estadísticos, los teóricos, los gestores, las empresas (como el Instituto Cochrane) y los inversores capitalistas que son precisamente aquellos que dicen donde se pone el dinero». En consecuencia, manifestamos nuestra defensa de un modelo sanitario donde la palabra sea un valor a promover y donde cada paciente sea considerado en su particularidad. La defensa de la dimensión subjetiva implica una confianza en lo que cada uno pone en juego para tratar aquello que en él mismo se revela como insoportable, extraño a sí mismo, pero sin embargo familiar. Manifestamos nuestra repulsa a las políticas asistenciales que persiguen la seguridad en detrimento de las libertades y los derechos. A las políticas que, con el pretexto de las buenas intenciones y de la búsqueda del bien del paciente, lo reducen a un cálculo de su rendimiento, a un factor de riesgo o a un índice de vulnerabilidad que debe ser eliminado, poco menos que a la fuerza.

Para cualquier disciplina, la aproximación a la realidad de su campo se hace a través de una teoría. Este saber limitado no tendría que confundirse con La Verdad,  pues, supondría actuar como una ideología o religión,  donde cualquier pensamiento, acontecimiento o incluso el lenguaje utilizado, está al servicio de forzar el re-ligare entre saber y verdad. Todo clínico con un cierto espíritu científico sabe que su teoría es lo que Aristóteles llamaría  un Organon, es decir, una  herramienta de acercamiento a una realidad siempre más plural  y cambiante, y donde las categorías encontradas han de dejar espacio a la manifestación de esa diversidad, permitiendo así una ampliación tanto teórica como práctica. Esta concepción se opone  a la idea de un canon, en el sentido de lo que necesariamente, obligatoriamente y prescriptivamente las cosas son y han de funcionar de determinada manera. Todos sabemos las consecuencias de esta posición que va de lo orientativo a lo normativo, prescriptivo para, finalmente, convertirse en coercitivo. Es ahí donde el saber se convierte en el ejercicio de un poder en tanto sancionador, en un sentido amplio, de lo que obedece o desobedece a ese canon. Ordenación de la subjetividad al Orden Social que reclaman los mercados. Todo para el paciente sin el paciente. Un saber sin sujeto ya es un poder sobre el sujeto. Autoritarismo científico, lo llama J. Peteiro.  Por todo esto queremos manifestar nuestra oposición a la existencia de un Código de Diagnostico Único Obligatorio y Universal.

Por otra parte, el modelo a-teórico del que hace gala el DSM, y que se ha querido confundir con objetividad, nos habla de su falla epistemológica.  Baste recordar su indefinición sobre qué podemos entender como trastorno mental, así como por salud psíquica. Los contenidos de esta taxonomía psiquiátrica responden mucho más a pactos políticos que a observaciones clínicas, lo que da lugar a un problema epistemológico muy grave.

En cuanto al método clasificatorio del DSM, constatamos que se puede clasificar, amontonar o agrupar muchas cosas, pero eso no es establecer una entidad nosográfica en un campo determinado. Por último, y en la misma línea que lo anterior, la estadística empleada en el DSM tiene un punto de partida débil: la ambigüedad del objeto sobre el que se opera, es decir, el concepto de trastorno mental. La estadística se presenta como una técnica, un utensilio que puede ser puesto al servicio de múltiples causas y de todo tipo. Son las personas quienes manejan los ítems y valores de base de la curva estadística, pero también quienes deciden el deslizamiento, más o menos hacia los márgenes de lo que se va  a cuantificar e interpretar posteriormente.
En este contexto de pobreza y confusión conceptual, la próxima publicación del DSM-V supone una clara amenaza: nadie quedará fuera de aquello que se detiene, de lo que enferma. No quedará espacio para la salud, en términos de cambio, de movilidad, de complejidad o de multiplicidad de las formas. Todos enfermos, todos trastornados. Cualquier manifestación de malestar será rápidamente transformada en síntoma de un trastorno que necesita ser medicalizado de por vida. Éste es el gran salto que se realiza sin red epistemologíca alguna: de la prevención a la predicción.
Umbrales diagnósticos más bajos para muchos desórdenes existentes o nuevos diagnósticos que podrían ser extremadamente comunes en la población general, de esto nos advierte Allen Frances, jefe de grupo de tareas del DSM IV,  en su escrito Abriendo la caja de Pandora. Refiriéndose a los nuevos trastornos que incluirá el DSM-V, este autor cita algunos de los nuevos diagnósticos problemáticos: el síndrome de riesgo de psicosis, («es ciertamente la más preocupante de las sugerencias. La tasa de falsos positivos sería alarmante del 70 al 75%»). El trastorno mixto de ansiedad depresivaEl trastorno cognitivo menor, («está definido por síntomas inespecíficos... el umbral ha sido dispuesto para    incluir un enorme 13.5% de la población».)  Trastorno de atracones. El trastorno disfuncional del carácter con disforia. El trastorno coercitivo parafílico. El trastorno de hipersexualidad, etc. Aumenta, por tanto, el número de trastornos y aumenta también el campo semántico de muchos de ellos, como el famoso TDAH, ya que se permite el diagnóstico basado sólo en la presencia de síntomas, no requiriendo discapacidad y, además, se reduce a la mitad el número de síntomas requeridos para adultos. El diagnóstico de TDAH también se contempla en presencia de autismo, lo cual implicaría la creación de dos falsas epidemias e impulsaría el uso aumentado de estimulantes en una población especialmente vulnerable.
Si juntamos este manejo estadístico con la heterogeneidad temática de los grupos de trabajo, que se multiplican y que van desde la identidad de género, pasando por la adaptación de los impulsos, hipersexualidad, cambios de humor etc., no podemos obviar que las clasificaciones internacionales pretenden una autonomía total respecto de cualquier marco teórico, y por ende, libre de cualquier tipo de control de rigor epistémico. Sin embargo, no creemos que las clasificaciones y tratamientos puedan ser neutrales respecto a las teorías etiológicas, como se pretende, y al mismo tiempo ser neutrales respecto de la ideología del Control Social, e intereses extra clínicos.

Paul Feyerabend, en El mito de la ciencia y su papel en la sociedad, nos dice: «Básicamente, apenas si hay diferencia alguna entre el proceso que conduce a la enunciación de una nueva ley científica y el proceso que precede a una nueva ley en la sociedad». Parece ser, sigue diciendo este autor en Adiós a la razón, que: «El mundo en que vivimos es demasiado  complejo para ser comprendido por teorías que obedecen a principios (generales) epistemológicos. Y los científicos, los políticos -cualquiera que intente comprender y/o influir en el mundo-, teniendo en cuenta esta situación, violan reglas universales, abusan de los conceptos elaborados, distorsionan el conocimiento ya obtenido y desbaratan constantemente el intento de imponer una ciencia en el sentido de nuestros epistemólogos».

Finalmente, queremos llamar  la atención  del peligro que supone para la clínica de las sintomatologías psíquicas, que los nuevos clínicos estén formateados, deliberadamente, en la ignorancia de la psicopatología clásica, pues,  ésta responde a la dialéctica entre teoría y clínica, entre saber y realidad. Psicopatología clínica que ya no se enseña en nuestras facultades ni en los programas de formación de los MIR y PIR. Y sin embargo, se les alecciona en el paradigma de la indicación... farmacológica:  universalización prescriptiva para todos y para todo, y que en nada se diferencia  de una máquina expendedora de etiquetas  y reponedora de medicación.  El resultado que denunciamos es un desconocimiento de los fundamentos de la  psicopatología, un escotoma importante a la hora de explorar a los pacientes y, en consecuencia, una limitación más que considerable a la hora de diagnosticar.

En tanto que el conocimiento es la forma más ética que tenemos de acercarnos a nuestra plural realidad, no ha de ser un problema la coexistencia de diferentes saberes sobre la complejidad del ser humano.

Por todo ello proponemos llevar a cabo acciones con el objetivo de poner límite a todo este proceso incrementalista de las clasificaciones internacionales, y trabajar con criterios de clasificación que tengan una sólida base psicopatológica y, por tanto, que provengan  exclusivamente de la clínica.

Barcelona, a 14 de Abril de 2011


PARA FIRMAR EL MANIFIESTO PULSAR AQUÍ.


AGRADECEREMOS LA MÁXIMA DIFUSIÓN DE ESTE PRIMER MANIFIESTO (al que seguirán otros de diferentes países).

Información y contacto:  stopdsm@gmail.com




dissabte, 26 de març del 2011

En el marco de la campaña A favor de una psicopatología clínica, que no estadística:

En este Congreso se organizarán varias mesas para debatir el DSM y otros manuales de clasificación.

dilluns, 21 de març del 2011

STOP DSM, nuevo blog



Hemos abierto un nuevo blog con la intención de incorporar los diversos manifiestos que se elaboren en favor de una psicopatología clínica, que no estadística (que contemple la subjetividad). Próximamente publicaremos el escrito definitivo de Espai Freud sobre esta cuestión. En París se está redactando un manifiesto en el mismo sentido, Y desde hace unas semanas nos estamos coordinando con el FORUMADD de Buenos Aires. Promoveremos, además, una recogida de firmas desde el mismo blog. Éste servirá, asimismo, para difundir las actividades que se organicen en las diferentes ciudades y países.


dijous, 10 de febrer del 2011

Grabación de la mesa redonda ¿Cómo cura el psicoanálisis?

Grabación de la mesa redonda organizada por Espai Freud que bajo el título ¿Cómo cura el psicoanálisis? tuvo lugar el pasado día 4 de febrero en la sala de actos del Col.legi Oficial de Psicòlegs de Catalunya. El acto contó con la presencia de los psicoanalistas Manuel Baldiz, Laura Kait, Joseph Knobel y Rosa Royo. Coordinó el encuentro Daniela Aparicio.











dissabte, 8 de gener del 2011

¿Cómo cura el psicoanálisis? Debate

Sí, el psicoanálisis cura, reduce dolores y sufrimientos. Pero a la vez apuesta, mas allá de eso, por una transformación subjetiva. Por eso es más que una cura, es un proyecto de cambio.

¿Cómo lo hace? Esta es la pregunta que nos proponemos contestar, para que se sepa más, para difundir nuestra experiencia y ponerla a debate.

El psicoanalista confrontado con el dolor de existir orienta la cura con su ética, la que abre para cada sujeto un acceso particular a su diferencia y a su deseo. El sujeto se constituye y está alienado en el campo del Otro. En el trabajo analítico se desvela cómo cada sujeto ha respondido a lo que le fue impuesto.

Asimismo, todo sujeto es responsable de su posición subjetiva y de su deseo; esta es también parte de nuestra ética. A veces, los sujetos que abandonan no quieren saber nada de esta responsabilidad y se aferran a su posición de victima, irrenunciable.

Desde la pregunta que le hace Freud a Dora hasta la fecha, intentamos implicar al sujeto en su queja, para poder subjetivarla, para que algún día este pueda decidir si quiere lo que desea. ¿Has obrado conforme a tu deseo?

Wo Es war soll Ich werden. Donde ello era el sujeto debe advenir, un sujeto deseante y libre, en lo posible, de los mandatos ajenos.

Para algunas terapias el sujeto no existe. Existe el mandato del "traga y calla". No hay historia, no hay memoria que sitúe al sujeto en sus vínculos y en sus coordenadas simbólicas. ¿Cuál es su inscripción? Ninguna. Se actúa sobre un sujeto anónimo, sobre su cuerpo que deviene un saco que se llena, o se vacía. Reducir a los pacientes a una ecuación biológica y tratarlos como tales equivale a decapitarlos, literalmente. Es un acto de violencia en la infancia, y en la edad adulta también. Cuando eso es concebido así, cuando una madre o un médico contemplan la cuestión como un "traga y calla", no duden que allí está la clave de su patología, de su gravedad y cronificación, puesto que atenta contra la esencia misma del ser hablante. Atenta contra la subjetividad. Refleja, asimismo, una concepción muy concreta del sujeto que es colocado en un lugar de objeto pasivo del Otro.
Hay tratamientos que apuntan a la segregación del Mal. Si el fármaco puede reducirlo es porque está siempre fuera del sujeto que lo padece y hay que liquidarlo. No hay introspección ni autocrítica. El sujeto deviene un ser infantil e irresponsable, una víctima inocente que no podrá tomar partido en su cura, o en su vida.
Nuestro trabajo como analistas apunta sobre todo a contrarrestar y subjetivar este empuje generalizado y paranoide, que pretende siempre situar la causa fuera del sujeto. Esta es la apuesta y la ética del Psicoanálisis.

Daniela Aparicio


¿Cómo cura el psicoanálisis?

4 de Febrero de 2011, a las 20:00 horas

Mesa redonda con la participación de

Manuel Baldiz, Laura Kait, Joseph Knobel, Rosa Royo.

Coordina: Daniela Aparicio

Lugar: Col.legi Oficial de Psicòlegs de Catalunya

Rocafort, 129. Sala d'Actes. Barcelona

Organiza: Espai Freud


divendres, 7 de gener del 2011

Com cura la psicoanàlisi?


Divendres 4 de febrer de 2011, a les 20 hores



taula rodona


COM CURA LA PSICOANÀLISI?


Sí, la psicoanàlisi cura; redueix dolors i sofriments.
Però alhora aposta per una transformació subjectiva.
Per això és més que una cura, és un projecte de canvi.

Com ho fa? Aquesta és la pregunta que ens proposem respondre;
perquè es pugui conèixer i difondre la nostra experiència.
I per posar-la a debat.



Amb la participació de


Manuel Baldiz, psicoanalista, psiquiatre.

Laura Kait, psicoanalista.

Joseph Knobel, psicoanalista, psicòleg clínic.

Rosa Royo, psicoanalista, psicòloga clínica.


coordina:

Daniela Aparicio, psicoanalista, psicòloga clínica.

Divendres 4 de febrer de 2011, a les 20 hores

Lloc:

COL.LEGI OFICIAL DE PSICÒLEGS DE CATALUNYA
Rocafort, 129. Sala d'Actes.
Barcelona


ENTRADA LLIURE



Organitza: ESPAI FREUD




divendres, 22 d’octubre del 2010

PRIMER BORRADOR PARA UN CONSENSO A FAVOR DE UNA PSICOPATOLOGÍA CLÍNICA, QUE NO ESTADÍSTICA.


PRIMER BORRADOR PARA UN CONSENSO A FAVOR DE UNA PSICOPATOLOGÍA CLÍNICA, QUE NO ESTADÍSTICA.


Espai Freud convoca a todas las instituciones, asociaciones, colegios profesionales, centros de la red pública y privada, y a todos los profesionales en general, a debatir y posicionarnos a favor de un criterio de diagnosis clínica.

Aprovechando que en mayo-2013 entrará en vigor la nueva revisión del Manual Diagnóstico y Estadístico de los Desordenes Mentales (DSM), desde ahora y hasta esa fecha es el tiempo que se propone para llevar a cabo acciones y organizar debates sobre dos ejes centrales:

-Debatir sobre la utilidad clínica de una clasificación que, de revisión en revisión, ha ido perdiendo el saber de la Psicopatología Clásica.

-Consensuar un criterio clínico sobre las sintomatologías psíquicas.

El calendario que se propone es el siguiente:

-De aquí al inicio del 2011 enviar a Espai Freud (espaifreud@gmail.com) ideas y propuestas para confeccionar el escrito definitivo de la convocatoria a los debates que se proponen.

-Difundir el escrito definitivo a favor de una Psicopatología Clínica para recabar apoyos al debate, tanto a nivel estatal como internacional.

-Durante el primer semestre del 2011, los diferentes grupos e instituciones que se adhieran al manifiesto nos harán llegar sus propuestas de actos y debates, a fin de confeccionar un calendario de actividades a la manera de lo que hicimos durante el Any Freud.

-Durante el curso 2011-2012 se llevarán a cabo los debates programados.

-A finales del 2012 se llevará a cabo una Jornada final para exponer lo debatido en los diferentes grupos de trabajo y encontrar un consenso sobre los dos ejes de discusión que se proponen.

Transversalmente a los dos ejes de discusión citados, os convocamos a compartir el conocimiento clínico (logía) sobre el pathos (padecimiento sintomático, que no enfermedad) psíquico, y si este saber clínico nos autoriza a cuestionar la existencia de una salud psíquica, estadística o normativa, así como la impostura clínica e intelectual del desorden, trastorno, enfermedad mental.

Las clasificaciones internacionales ¿nos están causando más problemas que soluciones e impidiendo tratar lo posible?

Los tratamientos ¿sólo han ser paliativos para las consecuencias de la sintomatología psíquica y no para sus causas?

¿Ya nos va bien que en aras de la eficiencia se tienda -imponiéndose- al tratamiento único (terapias tipificadas para trastornos formateados), con el consiguiente menosprecio de las diferentes estrategias terapéuticas y la libertad de elección de los pacientes?

En definitiva, os convocamos a debatir sobre si las clasificaciones y los tratamientos pueden ser neutrales respecto a las teorías etiológicas, como se pretende, y al mismo tiempo ser neutrales a la ideología del control social e intereses extra clínicos.


Barcelona, a 20 de Octubre de 2010

ESPAI FREUD espaifreud@gmail.com

dissabte, 9 d’octubre del 2010

Psicoanàlisi i literatura. Andreas Embirikos, alliberador de l'amor.



PSICOANÀLISI I LITERATURA

Andreas Embirikos, alliberador de l'amor




dijous, 21 d'octubre de 2010, a les 20:00 hores



Taula rodona amb la intervenció de



HELENA BADELL, filòloga i traductora

i

MIQUEL BASSOLS, psicoanalista.


amb la presència de Leonidas Embirikos, fill del poeta.


Presenta i modera: Francesc Garreta.




lloc:

REIAL ACADÈMIA DE BONES LLETRES
Carrer Bisbe Caçador, 3. (Plaça Sant Just)
Barcelona


organitza: